jueves, 24 de diciembre de 2009

Misa del Gallo

La misa del Gallo es la celebración eucarística con la que la Iglesia Católica -desconozco si otras ramas del cristianismo como los ortodoxos, los anglicanos, los testigos de Jehová o los adoradores de la séptima pokeball también la realizan- conmemoran el nacimiento de Jesucristo en la madrugada del 24 al 25 de diciembre del año primero antes de Cristo.

Puede que fuera en el 1 d.C., no lo sé. ¿Puede alguien nacer en un año previo a su nacimiento, a él mismo? ¿Puede nacer después? Ni puta idea, oiga, pregúntenselo al tipo que hace los calendarios, o a su amigo el que pone sobre ellos fotos de tetudas manchadas de grasa de camión.

Pues bien, dicha eucaristía se celebra en la medianoche, imagino que pretendiendo coincidir con el supuesto momento exacto en que nació el citado Jesús de Nazaret.

¿Que no saben quién es ése? Si, hombre. Cómo no van a saber. Era un señor que antes fue un niño, y hacía unos milagros muy chulos, en plan pajaritos de barro que cobran vida; o también hacía cosas en un templo y dejaba a los sacerdotes flipando, y puede que por eso o por otras cosas anduvo treinta años sin salir mucho hasta que le levantaron el castigo y se dedico a recorrer los pueblos intentando que la gente fuese buena con su prójimo y otras cosas muy de puta madre; pero que después unos cuantos cabrones lo clavaron a una estaca y, cuando lo descolgaron, vinieron otros tipos y, en nombre de sus palabras de amor se montaron un negocio very lucrativo, y mataron herejes en su nombre, y asaron mocetas en su nombre, y besaron banderas en su nombre; y así otras muchas putas mierdas en su nombre.

¿A que ya les suena más?

El caso es que esos tipos, los colegas que aferrados a la arcaica tradición han mantenido la rentabilidad de su negocio de hipocresía y tergiversación de uno de los mejores mensajes que se le pueden dar al ser humano ("sed buenos; sin más, sacos de estiércol"), pues han decidido que esta Nochebuena la Misa del Gallo de Roma, ésa que oficia el Papa, se adelante de la medianoche a las diez, porque el Santo Padre está viejuno.

Que si, que el primo Ratzinger tiene más años que la orilla del Ebro (joder, si estuvo en las baterías antiaéreas nazis en la Segunda Guerra Mundial -verídico- como buen convencido de la supremacía aria -esto ya no lo sé seguro-), pero si nos ponemos tontos con eso de que las tradiciones están para cumplirlas, respetarlas, y no mover ni una coma de ridículas costumbres con miles de años de historia, pues eso. Que ajo y agua, y que trasnoche Benedicto, ¿no les parece?

Esto de mantener ciertas tradiciones y mover otras a su antojo es, cuanto menos, sospechoso. Y si no, que no hubieran elegido un Papa tan viejo. Que los pongan treintañeros, que seguro que no les importa salir un rato del Vaticano de madrugada.

Hagamos uno de esos absurdos ejemplos que tanto nos gustan en Bilis, y traslademos este caso a algo que, aparentemente, no tenga nada que ver. Por ejemplo, el All Star Weekend. ¿Sorprendidos? De eso se trata.

Imaginen que escogemos para participar en el concurso de mates a unos tipos con cara de rata, flacuchos, de metro cuareta máximo, gafas de pasta e incipiente bigote. Lo que vienen siendo unos pringaos muy serios. Además, serían unos putos blanquitos. Lamenteibol, vamos. Y después, viendo que los caras de culo que hemos escogido son incapaces de hacer un mate porque no levantan un palmo del suelo, bajamos la altura de las canastas.

Vamos hombre, no me jodas. ¡Para eso pillas unos negratas de dos metros y te sale todo de puta madre!

Pues esto, más o menos igual. Si el Papa tiene que hacer viajes internacionales, eternas audiencias y misas de madrugada, ¡pon alguien cuya salud se lo vaya a permitir, copón!

Ahora me vendrán con la cosa de que al Papa y sus cardenales están elegidos por la intercesión del Espíritu Santo, es decir, que es la voluntad de Dios la que ha querido que Ratzinger sea la cabeza de su Iglesia y tal y cual. Ah, si, si. Que ya sabemos que los Reyes son los padres (los de Felipe, al menos), así que no vengan jodiendo.

Miren, en el caso de que Dios exista, podría ser tal y como nos explica el cristianismo -es decir, de forma humanoide, omnisciente, omipotente, omnívoro y tal-, o podría no serlo. Podría ser una langosta o un sapo con tupé, ¿no? Los celíferos o los batracios anuros también tienen su derecho a sentirse el centro de la Creación, creo yo. Pero bueno, poniéndonos en el caso de que Dios sea, y sea tal y como nos decían en catequesis, ¿piensan que elegiría a gente así?

Gente que condena el uso de avances científicos que permiten salvar vidas, gente que ha apoyado durante siglos la explotación de las clases más desfavorecidas por parte de un Poder del que ellos formaban parte esencial, gente... Pues va a ser que no. Si a los Papas los escogiera Dios a dedo, serían tipos buenos de verdad, como Ghandi, Vicente Ferrer, o Iniesta.

Así que venga, déjense de chorradas, y si queremos ser los guardianes de la tradición y las costumbres antiguas, pues vale. Pero para todo y para todos. No para lo que me conviene, carne; y para lo que no, pescado.

Yo particularmente estoy hasta los cojones de hipócritas que dicen blanco y hacen negro, y aunque esto es sólo un ejemplo bastante banal -no lo es tanto el caso del nuevo obispo de San Sebastián, pero ya habrá tiempo para hablar de Rouco, del Komando Sotana y de María Martillo-, sirve perfectamente para demostrar de qué están plagaditas las altas esferas de la Iglesia Católica.

Y nada más. Hasta aquí llega el programa de hoy. Con esta parrafada que, más que probablemente, se la sude mucho pero que mucho, acaba el año de Bilis. Yo me despido deseándoles, como ya hice hará ahora un año, Meni Crijmas, caras de concha.

4 comentarios:

Antonio dijo...

Juas,juas,juas, me parto. ¡Bilis abandona(momentáneamente, espero) su lineaodiosistemática para plantarnos asín de sopetón un mensaje de paz y amor!: "sed buenos; sin más, sacos de estiércol". Lo celebraría, pero es que esta patraña la soltó, a mi modo de ver, un pirado, al que como convenía hacer caso, se le hizo caso. Si hay que elegir a alguien para hacer una religión porqué no a Eddar Stark, o a Pikachu, o Supermán, en fin, esa gente de firmes valores morales, principios increbantables, si es posible, con superpoderes, jajaja.
Buen artículo Bilis, llevaba tiempo sin reírme tanto.

M dijo...

Cara de concha con síndrome de Estocolmo, que así es más completo.

Pero aún queda mucho para el siguiente año, no vale despedirse tan prontooo.

PD: Como regalo de navidad pido la supresión de la verificación de palabras.

Pilar dijo...

M, no pidas esas cosas, que al final a la que le toca hacerlas es a mí!!!

Y tú! Cabeza cósmica! No me digas que no vas a escribir nada más en lo que queda de año?

Yaha! dijo...

La casualidad (o ese ente omnímodo y superior que mora los Cielos a quien llaman El Fary) ha querido que esta fuera la quincuagésimosegunda (52 para mis lectores menos dotados, que sois todos) entrada del 2009. Es decir, una por semana.
Me ha gustado la proporción, así que así se queda.
A no ser de que me hagais mucho la pelota y la semana que viene decida cagarme en los muertos de alguien, para regocijo vuestro.
'M', iba a preguntar qué era eso de la verificación, pero estoy viéndolo debajo de lo que escribo ahora. Obviamente, mis limitados (cuando limitado tiende a cero) conocimientos de informática, me impiden contentarla satisfaciendo su petición.
Por lo demás, muchas gracias por sus lecturas y comentarios, taxistas!