miércoles, 29 de septiembre de 2010

Huelga decir más

Hoy tenemos huelga general, y servidor ha salido a correr, por ver cómo estaba el patio. No se crean que esto es moco de pavo, pues estamos hablando de mí, un personajillo de vagancia tal que es capaz de comer con pan bimbo por no bajar a la panadería a comprarme una barra.

Partimos de la base de que servidor, que lo odia todo o casi todo, no hace ninguna excepción en el caso de los sindicatos. Al menos, de los sindicatos mayoritarios, que no son sino una bonita mascarada que los políticos -en especial el PSOE- aprovechan para simular un diálogo social que, por definición, es siempre un monólogo por parte de los que mandan. Que no es el Gobierno, precisamente, sino los empresarios que pagan los donativos que sustentan a los partidos políticos.

Así pues, me permitirán que me alegre después de haber visto que la huelga ha tenido el mismo seguimiento, punto arriba, punto abajo, que una partida de julepe televisada por Jose Ángel de la Casa. La gente está jodida con la crisis, a la gente no le parece bien la nueva Ley que instaura el despido libre (inciso: serás hijo de la gran puta y caradura, ZP, para atreverte a levantar el puño en tu mierda de mítines socialistas, y luego vender a todos los trabajadores, abandonándolos completamente ante la codiciosa arbitrariedad del empresario), pero la gente ha decidido mayoritariamente ignorar la huelga. Cosa que me encanta.

¡Ya basta de abrir la boca cuando se nos mean en ella, coño! Que no van a dejar de mear porque seamos buenos y nos traguemos el primer pis de cada día.

O sea, que a vosotros, sindicatos, camaradas Méndez y Toxo, que os habéis pasado los años más duros de la crisis untándoos los traseros de mantequilla, prestos a recibir remos por el orto en La Moncloa a cambio de fotos de consenso y más trinque por parte de vuestros compadres del puño y la rosa; a vosotros, digo, ¿hemos de seguiros ahora como corderitos? Va a ser que no, camaradas.

Y el día que haya unas nuevas elecciones, ¿qué váis a hacer todos estos que hoy enarbolais puños en alto al son que tocan esos mismos que os han mantenido dormiditos y sin dar guerra durante tantos años? ¿Votaréis a la ultraderecha para castigar a esta derecha contra la que ahora protestáis, y cuyas promesas creísteis, incautos, hace dos y seis años? Así se arreglan las cosas en este país: votando y callando hasta que el tipejo contra el que vas a protestar te lo ordene. Siempre a la sombra de chupópteros, politicuchos y sindicalistas de foto y pasteleo.

Lo de los piquetes es caso aparte, pues representan la parte más humilde y engañada de todo esto -o no, vete a saber, que muchos se ganarán hoy, poniéndo silicona en cerraduras, los votos para seguir siendo representante sindical en su empresa de mierda, lo que les dará media docena de horas al mes para tocarse las narices, sin importarles un pijo las condiciones laborales, como llevan haciendo toda la vida, desde que descubrieron el chollo-. Y ahí están los piquetes, presionando a otros pobres obreros como si ellos y no el Gobierno, o sus propios dirigentes sinciales de arriba, fueran los culpables de la crisis.

En fin, que toca hoy montar el cristo, como si todo esto viniera de ayer, viva la capacidad de reacción, tras dos años (qué digo dos, ¡seis!) de alfombras y sonrisas, poniendo buena cara a todo lo que hacía el Gobierno. Convocar una huelga hoy, con la reforma ya aprobada, es tan carente de sentido como ponerse un condón en día que nace tu hijo. Antes, melón, ¡esas cosas se hacen antes! Sois tontos hasta para eso.

Los currelas queman una estación, digamos que es un día feo y gris; todo hace suponer que acabarán pegaos a la pared. Mención especial merecen hoy, en este día de grandiosa lucha social española en pos de los derechos del proletariado -estoy por morirme de la risa ahora mismo después de esta última frase-, los mineros de las cuencas leonesas, que esperan a la resolución acerca de la continuidad de sus ayudas al carbón, merced a las cuales el sinvergüenza que les adeuda la paga desde verano, podrá recibir de las arcas públicas las perras para pagar a sus empleados. Todo muy lógico, claro que sí. A esto, me perdonarán, yo lo llamaría comunismo. Comunismo imbécil, para más señas.

Desde Bilis, un aplauso y una pequeña observación: está bien encerrarse en la mina, está de puta madre prender fuego a cosas, y está mejor aún hacerse un bazoka con unos tubos de acero y jugar a los antidisturbios contra la Policía -a los mineros poco se acercan a calentarles las costillas en estos casos, como harían en una protesta de agricultores, costureras o jugadores de pádel; cagones, mierdecillas, eso es lo que sios, abusones-; pero cuando se corta una carretera y le jodes la mañana a un tipo que lleva un camión de leche y va a tener que currar siete horas más de las que debería porque al hijo de puta de su jefe se la suda que haya estado parado media mañana en pleno Bierzo, quizás deberían plantearse -es sólo una pequeña ocurrencia, lejos de mí atreverme a querer saber más que unos tipos que mantienen a raya a la madera con armas caseras- el plantarse en casa del desgraciado dueño de la mina que les debe tres mensualidades y pegarle fuego al chiringuito, o algo igualmente divertido.

Y, bueno, así es el día, más o menos, en una huelga general española. Después, unos hablarán del noventa por ciento de seguimiento con la misma naturalidad que otros hablan del nueve; los vascos y catalanes dirán que allí nadie ha seguido nada porque patatín y patatán, opresión, democracia...; y por la noche, muchos de los que no han secundado la huelga no por razones ideológicas, sino por no perder un día de sueldo, acabarán gastándoselo en una entrada para ver en Mestalla al Manchester United. España es asín.

Para acabar, y ya puestos a autobiografiarme, les contaré que también entreno a un equipo infantil de fútbol, en el que aplico todos los dogmas que Bilis proclama con intermitente frecuencia ante ustedes: mala baba, ansias de matar y hacer las cosas como Dios (Iniesta) manda. De ahí se deduce mi gusto porque los pequeños demonios se la pasen a otro que vaya vestido de rojo como ellos, toquen y toquen y toquen, hasta que, llegado el momento adecuado -aguantar el 0-0 en el minuto dos es tan bueno como otro cualquiera- llegue el momento de defender con cinco, sacar las segadoras a paseo y colar cada pelota por encima de los chopos.

Bueno, todo esto viene a que, ayer, tuve la siguiente conversación con uno de esos satanases.

-¿Vas a trabajar mañana?
-No.
-¡Eres anarquista! (Risas de los niños)
-No, soy un parado.

Muy lamentable. Por eso me cago en Zapatero, que no me da la opción de que me manden a la puta calle por culpa de su mierda de reforma laboral, porque llevo en el paro desde que ésta sólo existía en la mente maligna del pseudosociata de las cejas; y me cago en los putos sindicatos, que convocan la primera huelga general de mi vida laboral cuando soy cliente asiduo del Inem, impidiéndome ir a trabajar y demostrar así que me paso sus huelgas inútiles, fruto de su hartazgo tras dos años de comer pene de gobierno, por el forro de mis cojones.

viernes, 24 de septiembre de 2010

Ciervos, corzos y gacelas

1.-Tu Rey es un borracho; tu actual Presidente del gobierno es un capullo integral, y el de antes era un fascista asesino; en cada despacho tienes a un tipo dispuesto a atracarte; el anterior capitán de tu adorado equipo nacional de fútbol tenía una pierna de madera y la otra de hormigón... ¿y aún tienes el valor de cantar orgulloso que eres español? Panoli.

2.- La solución para acabar con el paro es el despido libre.

3.- Y la solución para acabar con la pederastia es violar niños.

4.- Una de matemáticas: de la misma manera que en la suma de los cuadrados del seno y el coseno de un ángulo, el cociente intelectual de todos los simios presentes en el plató de Sálvame también suma siempre uno.

5.- Esperanza Aguirre y María Dolores de Cospádel -jajaja, humor sin pretenderlo, cosas de la completa falta de conocimientos mecanográficos- pueden parecer dos políticas de ultraderecha, pero en realidad son dos pedazo de putas.

6.- Sólo puede quedar uno: En una pelea a muerte entre los Ultras Sur, Herri Norte, el Frente Atlético, los Yomus, Indar Gorri, los Boixos Nois y todos los presentadores de Intereconomía, ganaría la Humanidad.

7.- De sus leyes en política migratoria y simbología religiosa, se deduce que el mayor enemigo del Estado francés sería una gitana negra, con burka, viviendo en un campamento ilegal en un barrio de las afueras que se paseara por un parking con un mechero en la mano.

8.- Palabros. Tunning: relación matemática basada en el arte contemporáneo que sirve para expresar que el grado de modificación de un vehículo es inversamente proporcional a la capacidad cerebral del dueño del mismo.

9.- Más mates, hoy estamos que lo tiramos. Regla de tres marianil: si lo del Prestige eran unos pequeños hilillos de plastilina, lo de BP en el golfo de México debe ser la colección completa de productos Play Doh.

10.- ¿Qué le dice Marichalar a un coprófago? Lo que tú haces con la caca, yo lo hago con la coca.

11.- Dada la esfericidad de nuestro planeta, cuando un musulmán se orienta hacia La Meca para rezar -y debido a que, como todo el mundo sabe, las oraciones se propagan en línea recta-, en realidad está trazando una tangente a la Tierra desde su habitación, que se aleja de su destino con rumbo al espacio exterior. A cinco rezos diarios, podemos decir que en la Vía Láctea hay más plegarias a Alá que asteroides.

12.- Noventa y nueve de cada cien políticos merecen una hostia en la boca. El centésimo se murió la semana pasada.

13.- La izquierda abertzale plantea expandir el metro de Bilbao con nuevas líneas hasta Tudela, Biarriz, Sangüesa y Labastida, para expulsar definitivamente a los opresores de toda Euskal Herria. Taxistas kanpora!

14.- Si Belén Esteban está viva y ha tenido descendencia, Darwin son los padres.

15.- ¿Que pasaría si dentro de mil años nuestro campechano monarca el Juancar de Borbón se viera en la misma situación que Henry Kissinger y Richard Nixon en Futurama, charlando mientras su cabeza flota en un bote de líquido amniótico? Fácil. Se lo bebería.

16.- Tras el éxito de Águila roja, una serie en la que un maestro de escuela castellano viaja a China en el siglo dieciséis para ser samurai y así vengarse en plan matrix de los inquisidores que mataron a su esposa, TVE ya prepara otra gran serie fantástica: tratará sobre un futbolista con una pierna de madera que, cansado de ganarlo todo con la Selección española, emigra a Gelsenkirchen para hacer campeón al Schalke 04. Mono blanco, se llamará.

17.- Tras dejar de ser -en este u otro orden- español, obrero, socialista y partido, el PSOE concurrirá a las próximas elecciones bajo las siglas CO: Conjunto Vacío.

18.- ETA renuncia a las acciones ofensivas. ¿Tendrán a Clemente en el banquillo?

19.- Abundando en el punto 16; está claro que las series de la televisión pública no resultan creíbles, pero si a TVE se le dió bien su primera andadura en la ciencia-ficción con Ana y los siete, donde la Obregón no solo perjuraba ser la autora de los guiones, sino que también era capaz de hacer sumas elementales sin llevadas, ¿para qué cambiar el estilo?

20.- Auxiliares: 'Cagüendios' es al idioma riojano lo que 'do' al inglés o la alianza de civilizaciones a Zapatero: no significan nada, pero hay que usarlos mucho.

Y 21.- Todo lo anteriormente expuesto es tan empíricamente demostrable como mi odio hacia todos los mencionados. Bueno, no; Raúl, más que odio, produce pena.

domingo, 19 de septiembre de 2010

Un maño

Ni tú, ni yo, ni el otro la llegaremos a ver, pero habrá que empujarla para que pueda ser.

Había una vez un hombre que cantaba al cierzo, a su tierra, a la gente corriente y, ante todo, a la libertad.

Habrá un día en que todos
al levantar la vista
veremos una tierra
que ponga libertad.

Hermano aquí mi mano,
será tuya mi frente,
y tu gesto de siempre
caerá sin levantar
huracanes de miedo
ante la libertad.

Haremos el camino
en un mismo trazado
uniendo nuestros hombros
para así levantar
a aquellos que cayeron
gritando libertad.

Sonarán las campanas
desde los campanarios
y los campos desiertos
volverán a granar
unas espigas altas
dispuestas para el pan.

Para un pan que en los siglos
nunca fue repartido
entre todos aquellos
que hicieron lo posible.
Para empujar la historia
hacia la libertad.

También será posible
que esa hermosa mañana
ni tú, ni yo, ni el otro
la lleguemos a ver,
pero habrá que empujarla
para que pueda ser.

Que sea como un viento
que arranque los matojos
surgiendo la verdad.
Y limpie los caminos
de siglos de destrozos
contra la libertad.

Un hombre que intentó ensalzar todo lo bueno que tenía su tierra sin por ello despreciar a otras tierras y otras gentes, lúcido para amar lo suyo sin caer en el ridículo disparate del nacionalismo.

Un hombre que consiguió la palabra allí donde la gente como él, hombres normales con preocupaciones normales, jamás tiene voz; y la uso para mandar a tomar por el culo a todos esos mangantes que viven de sorber la sangre a tantos y tantos hombres normales como él fue.

Un hombre con una mochila, un alma de pueblo hecha canción y un par de cojones. Un buen tipo, creo. Ayer murió. Ya no está Jose Antonio Labordeta, pero en su nombre, en el nombre de la libertad, la gente corriente, y los tipos con mochila que caminan por los pueblos comiéndoles el embutido a las viejas, yo me cago en los muertos de todos los que compartisteis hemiciclo con él. Ojalá hubierais sido vosotros, cabrones.

viernes, 17 de septiembre de 2010

Soneto a tus vísceras

Harto ya de alabar tu piel dorada,
tus externas y muchas perfecciones,
canto al jardín azul de tus pulmones
y a tu tráquea elegante y anillada.

Canto a tu masa intestinal rosada
al bazo, al páncreas, a los epiplones,
al doble filtro gris de tus riñones
y a tu matriz profunda y renovada.

Canto al tuétano dulce de tus huesos,
a la linfa que embebe tus tejidos,
al acre olor orgánico que exhalas.

Quiero gastar tus vísceras a besos,
vivir dentro de ti con mis sentidos...
Yo soy un sapo negro con dos alas.


De Baldomero Frenández Moreno
(Buenos Aires, 1886-1950).
Ésto es una canción de amor, y lo
que suena en Los Cuarenta es pura hez.

martes, 14 de septiembre de 2010

Terry Jones, un cura con bigotón

Como los medios de comunicación españoles están inmersos en una orgía de destrucción cerebral comandada por la Esteban en Telecinco y apoyada militarmente por el calvo de la Fórmula1, los voceras de Punto Pelota, y los analistas políticos de Falange Española, digo, de Intereconomía, ninguno de ellos ha tenido tiempo para abandonar sus redundantes reflexiones sobre el tobillo de CR7 o los pelos del potorro de alguna Jenny de Telahínco.

Por eso en Bilis, inmersos como siempre en grandes labores humanitarias, hemos decidido desplazarnos hasta la Florida -el estado, no el parque de Vitoria- para hablar con el ínclito Terry Jones, el único reverendo protestante con nombre híbrido de brandy, pirata, y raza de perro-patada, para conocer sus interesantes opiniones.

[Bilis]: ¿Vaya Cristo que montaste, eh Terry?
[Reverendo Terry Jones]: Ya te digo, Salinas.

[B]: ¿Se esperaba semejante repercusión?
[RTJ]: Qué va. A mí por lo general no me hace caso ni mi mujer. Por eso bebo zarzaparrilla los miércoles por la noche y cuando vuelvo a casa todo ciego la doy con el cinturón en el lomo. Menuda perra, oigan.

[B]: (Cara de póker.)
[RTJ]: All in.

[B]: Bueno, señor Jones, comparta con nuestros distinguidos lectores sus motivaciones. ¿Qué pretendía usted con la quema de coranes?
[RTJ]: Quería enseñar al mundo que un tipo con un bigote ridículo y un jardín grande delante de su almacén puede captar toda su atención durante una semana.

[B]: ¿Sólo eso?
[RTJ]: Bueno, de paso también quería demostrar que el Islam es malvado.

[B]: ¿Y por qué la suspendió?
[RTJ]: Para evitar que, en replesalia por la quema de un libro, los radicales islámicos matasen a todos los yankis que pudieran (una vez más).

[B]: Pero señor Jones, ¿no habría quedado claro de esa manera que son malvados, al poner en el mismo nivel un libro y una vida, obteniendo usted la demostración que desde un principio deseaba?
[RTJ]: Ostia, pues sí. No me dí cuenta. Paso demasiado tiempo atusandome el bigote y pegando a la guarra de mi mujer como para pararme a reflexionar sobre mis actos. Además, así podré ser el protagonista de una teleserie con muchas banderas de barras y estrellas que enseñará a la gente que ve Antena3 por las tardes, que tu patria es más importante que tus convicciones religiosas, e incluso que tu propio bigote.

[B]: Pudimos leer en su jardín cuatro carteles de grandes letras rojas con las palabras Islam, Is, From y Devil. ¿Se trata de algún mensaje oculto?
[RTJ]: Tú no sabes mucho inglés, ¿verdad?

[B]: No, menos mal que usted sabe responder a todas mis preguntas tan sólo con las palabras de idioma eusquérico que yo conozco gracias a las retransmisiones de pelota mano de la ETB. Si no no sé cómo habría sido posible esta entrevista. A lo que íbamos, ¿qué quiere decir lo de los carteles?
[RTJ]: Significa El Islam es del diablo.

[B]: O sea, que piensa usted que el Islam es diabólico, ¿por qué?
[RTJ]: Very easy, my friend. Porque predica la violencia como forma de someter a aquellos que no adoran a su dios.

[B]: Si se piensa bien, podríamos decir que durante la conquista de mayas, aztecas o incas, también se mataba en nombre de un Rey y, ante todo, de una religión.
[RTJ]: Exactamente, pero eso fueron cosas de católicos, gentes creyentes en milagros absurdos, profusos fornicadores y adoradores de muñecos de madera. Los protestantes -ya sean luteranos, calvinistas, anglicanos, baptistas, luisfabianos, o de la iglesia del séptimo bigote, como yo- no tenemos nada que ver con esos papistas del infierno.

[B]: ¿Y qué me dice de los indios de las llanuras de Norteamérica? A esos no los exterminaron los católicos, sino reformistas cristianos como usted.
[RTJ]: (El Reverendo Jones reflexiona, o al menos se atusa el bigotón dándose apariencia de pensador). Lleva usted razón, pero esto no implica nada. Simplemente demuestra que una buena campaña de publicidad tiene un inmenso valor. Todo es cuestión de semántica: evangelio viene del griego, y quiere decir buena noticia. Yihad en cambio quiere decir guerra santa.
Si tú acribillas a todo el que no piensa lo mismo que tú, hasta que los cuatro gatos que quedan deciden que es mejor apuntarse a tu secta a que les quemes en la hoguera, les lapides, o les cortes la cabeza, pero lo haces asegurando que de esa forma extiendes la buena noticia, a la larga eres mucho más molón que si haces lo mismo aduciendo simplemente que todos los que no adoren a tu Dios merecen morir.

[B]: Gran idea, le felicito. Así que el secreto está en utilizar palabros griegos de hermoso significado.
[RTJ]: Antes sí. Ahora, gracias al Todopoderoso, ya ni siquiera es necesario utilizar palabras como evangelio. Con decir que se mata en nombre de la paz y la libertad es suficiente. Porque eso mola. Pero matar por orden de un profeta que te ordena expandir tu fe a sangre y fuego, sin pretender apropiarse ni siquiera de unos poquitos pozos de petróleo... Eso es propio de bárbaros que no merecen ser llamados humanos.

[B]: (Cara de póker again.) Muchas gracias por su atención, señor Jones.
[RTJ]: Gracias a ustedes. ¡Viva la democracia, la libertad, y la quema sureña de negros! ¡Yueséi, Yueséi!

Y Bilis abandona las pantanosas tierras de la Florida, donde el reverendo se despide de nosotros rodeado de familiares y amigos; su hermano Paco, su hijo Lacoste, que es un caimán, y su esposa Martha, a la que fustiga con su bigote ante nosotros a modo de despedida. Mucho puede enseñarnos el reverendo acerca de los cuidados del vello facial.

Sobre asuntos de fanatismo religioso, podemos apaciguar nuestras ansias de comprensión teniendo en cuenta que el Islam se origina en el año 622, con lo que ellos viven ahora en plena Edad Media, y como buena religión monoteísta que son, tratan de repetir todo el humor fanático que los cristianos teníamos allá por el año 1388. La única diferencia estriba en que en el siglo XIV, si eras un hijo de puta con ganas de matar en nombre de Dios, te comprabas una alabarda, un espadón o un arco, y te calzabas a la gente de uno en uno, mientras que hoy, los chicos de Alá cuentan con dinamita, ametralladoras, aviones comerciales o bombas de plutonio para exprimir al máximo su particular medievo. Que viva la ciencia.

viernes, 10 de septiembre de 2010

Cuando los payasos dominen la Tierra (V)

Juro por Dios, por Franco, y por don Santiago Bernabeu -puede que no en ese orden- que el domingo dejé de creer en las leyes de la probabilidad.

Llegué a casa a las siete y media de la mañana, con mas calimocho que leucocitos en el cuerpo y me dispuse a ingerir un descomunal plato de espaguetis con carne picada y tomate. Lo lógico, vamos. Para amenizar la jugada, tuve la ocurrencia de prender el televisor.

Si en España somos unos cuarenta y siete millones, y uno de cada ¿diez mil? ciudadanos acaba sufriendo retraso mental, ¿qué posibilidad hay de que todos los hijos de la gran puta que salieron en la pantalla fuesen completamente imbéciles?

La respuesta puede ser tan sencilla como terrorífica: en televisión sólo salen gilipollas.

Si yo hubiera sido Mickey Mouse, y hubiera tenido capacidad psicomotriz para encontrarme los ojos, mi reacción bien pudiera haber sido algo así. Pero como no soy el bicho de mierda ése que comparto con ustedes por cortesía de ElPitoDoble, decidí mantener mis uñas fuera de mis córneas y acumular todo mi odio para poder desplegarlo ante todos ustedes en una nueva entrega -la quinta ya- sobre esa caterva de peligrosos deficientes cognitivos a los que hemos otorgado el poder para dominar nuestras lamentables vidas, payasos de un circo en el que, sorprendentemente, lo más cómico está entre el público y eres tú, querido amigo lector.

Sí, sí. No niego la comicidad del presidente de Andalucía (cuyas ridículas declaraciones en aquel telediario matutino, he de reconocerlo, soy incapaz de recordar; cosas del tintorro), de Leire Pajín, de Mariano Rajoy o de Joan Laporta, pero la culpa de su presencia en la caja tonta no la tienen ellos, sino todos los que les toleramos, les ignoramos o, lo que es más grave, incluso les apoyan, animan, jalean y defienden.

La que más rato estuvo en pantalla -y por ende, la que más estupideces dijo, pues esta gente sale a idiotez por apertura de boca- fue la amiga Leire Pajín, que hace así su primera aparición en Bilis, algo que me sorprende incluso a mí, dado el mogolismo intrínseco del personaje, la afición que tenía su madre a meter la mano en la caja del ayuntamiento valenciano donde aposentaba su corrupto trasero, y el silencio del que en aquella ocasión doña Leire, siempre azote de los fachas de la gaviota, supo hacer gala. Ver la paja en el ojo ajeno y no el lefazo en el propio, dice el refrán.

¡Ay, Leire! Tú que tuviste la ocurrencia de calificar como "acontecimiento planetario" la coexistanecia de Zapatero y Obama al frente de sus respectivos países, cómo no has venido antes a los amorosos líquidos intestinales de este humilde blog.

Quizás fuera porque estabas muy ocupada lanzando por tu boca toda la mierda que tu trasero es incapaz de excretar, o acaparando búsquedas internáuticas. Porque si entra usted en Google Imágenes y teclea demagogia, sale la cara de Leire Pajín sacándose un moco. Si teclea mongolismo elevado a la enésima potencia, sale la cara de Leire Pajín comiéndose ese mismo moco. Si teclea mecagüendios que nervioso me pone esta hija de puta bocazas con su palabrería incapaz de aportar nada que no sea estupidez y progresismo barato de mierda, probablemente saldría yo en plan Mickey, con los brazos hasta el codo introducidos en la cavidad ocular.

Pero no sólo la Pajín tuvo a bien atacar el escaso intelecto de un borracho dominguero, también Mariano Jarrai -más conocido como El Tipo Al Que Aznar Puso A Dedo A Las Puertas De La Moncloa Y Acabó Derrotado Por Un Inútil Que Se Parece A Mister Bean Pero En Absurdo- abundó en la extendida costumbre de criticar sin proponer, llegando incluso más allá. "Tengo cincuenta medidas para salir de la crisis en cuanto gobierne, pero no os las voy a decir. Jeje, que gangoso soy. A ver si acertáis alguna mientras os hundís en la mierda, os quedan seis meses. Saludos a los parados mientras tanto."

Y para rematar la faena, apareció en escena Joan Laporta presentando un partido político que se ha sacado de la chistera, supongo que con la saludable intención de continuar haciendo a costa de todos los catalanes lo que ha estado siete años haciendo con los socios del Barça. Es decir, robar. Y ponerse ciego en discotecas con tarjetas de crédito prestadas.

Yo me fui a la cama con la tripa llena de espaguetis con carne y una considerable dosis de ganas de matar cociéndose lentita en el cerebro, pensando en que con la Pajín y el Rajoy nos la clavaron bien, y que aquellos bobos que acudieron a votarles se encontraron con la calaña de los personajes a posteriori, pero si en Cataluña hay alguien lo suficientemente idiota como para votar a Laporta una vez comprobado todo de lo que es capaz, entonces será mejor no quejarnos, admitir que todo lo tenemos merecido, viajar a Disnaylandia, y sacarnos los ojos.

viernes, 3 de septiembre de 2010

Manual de buenas intenciones

Es septiembre, el mes ideal para, una vez dejados atras los calores y excesos veraniegos, decidirnos de una vez a hacer realidad esa gran cantidad de cosas que, por hache o por be -o por Euskal Herritarrok-, llevamos dejando desde hace tiempo.

Que si apuntarnos a un gimnasio, que si aprender inglés, que si tomar un curso de diez días de instrucción aérea y liarla parda... Cosas que siempre decimos y nunca hacemos (o sí, pregunten por Nueva York). Por eso, para que dejen ustedes de autoconvencerse con propuestas de mierda que saben que no llevarán a cabo, Bilis, en un nuevo alarde de servicio público, les acerca la lista de propuestas definitivas.

Si otras publicaciones como Loka o Física o química: la revista, antorchas del saber occidental de nuestros días, obsequian a sus lectores con listas y encuestas varias que les proporcionan, a partes iguales, felicidad, entretenimiento y conocimientos sobre cuál de los Jonas Brothers estaría más predispuesto a desvirgar a sus hijas, aquí les vamos a contar cuáles son los propósitos de nuestros ídolos para este nuevo curso.

¿Y dónde están nuestros ídolos? Pues en la pequeña pantalla, lógicamente.

Si desea usted emular a uno de los especímenes que frecuentan El diario de Patricia, un muestrario andante de piercings y demás chinchetas en la geta, amantes del tunning y consumidores de un bakalao que llevaría al suicidio al propio Arguiñano, quizás debería apuntarse a una academia en la que le enseñen a sumar y restar. No me malinterpreten, no digo que en sus cuatro años repitiendo quinto de EGB no hayan adquirido los conocimientos necesarios para calcular cuántos caballos tiene más el coche del Rulas que el del Jonathan, pero tras una década de politoxicomanía esas cosas se van olvidando. (Ésas cosas y otras, pero como no existen academias en las que les vayan a enseñar a seguir controlando el esfinter al cumplir los cuarenta, no abundaremos en el tema.)

No descubro nada nuevo si digo que la máxima aspiración de toda la población española es, en estos días de crisis y paro, el convertirse en uno de los sexys protagonistas de Prostitutas, chulos y viceversa.

La cosa es que antes de imitar a estos pájaros en sus actividades septembriles es menester recomendarles a ellos mismos algo que hacer. (Insisto: drogarse no cuenta.) A las 'concursantes' les recomendaría, ya que dominan a la perfección el arte de la correcta respiración nasal -ventajas que tiene el pasarse media vida con una polla en la boca-, un curso de submarinismo a pulmón. Todo son ventajas: se disfruta de los fondos marinos, puese ser que capturen un cangrejo y puedan comer caliente sin tener que abrirse de piernas por primera vez en sus vidas y, quien sabe, con un poco de suerte confunden los conceptos de arriba y abajo y continúan exprimiendo el interior de sus siliconados pechos hasta ahogarse en el fondo del mar.

Y para los 'concursantos', un cursillo de cata: que abran la boca y comprueben a que sabe un cartucho de treinta gramos especial becada servido en escopeta a dos dedos de la propia campanilla. Y luego, si eso, que nos cuenten.

Podríamos seguir desgajando las actividades otoñales de los espejos de nuestro gran país que supo seguir sobre el azul del mar el caminar del sol, pero todo lo que aportáramos podría quedar concretado tan sólo con inscribirnos en las mismas actividades que la indiscutible diva y superestrella de la caja tonta -nunca mejor dicho-: Belén Esteban.

Desde luego, Belén necesita como el respirar unas buenas clases de matemáticas elementales -también de lengua y el resto de materias, pero no apuntemos demasiado alto-, y sin duda reune todas las características para ser, como los de MHyV, exploradora submarina o catadora de perdigones, pero si queremos hacer de nuestra vida un frenesí de sensaciones al estilo de la Esteban, la actividad definitiva para el otoño es la donación de nuestro cuerpo a la ciencia.

En serio, en las facultades de Medicina necesitan cobayas humanas. La neurocirugía pide a gritos voluntarios para realizar las prácticas de lobotomización. Después de eso, cualquier cosa que hagan les resultará tan excitante y novedosa como lo es para la princesa del San Blas. Nada de gimnasios, idiomas o llevar los estudios al día. Mariconadas. Échele un par y extírpese un cuarto de cerebro. Además el año que viene hay elecciones municipales y le vendrá bien ser completamente gilipollas a la hora de decidir a quien entregar su voluntad. Todo son ventajas.

Personalmente me encantaría apuntarme a ese plan, pero como desgraciadamente tengo más bien poco que pueda ser extirpable dentro del cráneo, me contentaré con ver menos la tele. Sólo hay que ponerle un poco de fuerza de voluntad, y quizás para diciembre ya esté usted trabajando el Telecinco. Nos vemos por navidades y comentamos la jugada, amigüitos.